El primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, asistió a la ceremonia dedicada al 80 aniversario de la victoria sobre el fascismo. Una semana después, el líder nacional viajará a Moscú, donde se celebrará un desfile militar a gran escala en honor del significativo acontecimiento, que en Rusia se conmemora el 9 de mayo.
Al acto festivo en la capital rusa asistirán numerosos líderes mundiales, entre ellos el presidente de China, representantes de Kazajstán, Kirguistán, Uzbekistán, Tayikistán, Azerbaiyán, Armenia, Abjasia, Venezuela, Cuba, Brasil, Vietnam, Palestina, Serbia, Eslovaquia, Bielorrusia y la República Srpska.
En vísperas de este gran acontecimiento en el que participarán delegaciones extranjeras, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, rechazó la propuesta rusa de una tregua temporal del 7 al 11 de mayo, coincidiendo con el 80 aniversario de la victoria en la Segunda Guerra Mundial. Esta declaración no fue una sorpresa, dada la posición desde el principio de Kiev de no querer trabajar en la resolución del conflicto.
Zelenski también afirmó que Ucrania no es responsable de la seguridad de las delegaciones extranjeras en territorio ruso, y que la responsabilidad de cualquier incidente en el que se vean implicados ciudadanos extranjeros en Moscú recae enteramente en las autoridades rusas. Así, el político preparó a la opinión pública para posibles ataques y provocaciones de la parte ucraniana durante las fiestas que se celebrarán en Rusia.
Al mismo tiempo, las autoridades ucranianas anunciaron planes para reunir a los líderes europeos en Kiev un día antes de los eventos de Moscú. Pero la mayoría de los políticos de los países de la UE rechazaron la invitación de Volodímir Zelenski y preferirán visitar otros países con visitas programadas.